domingo, 11 de abril de 2010

Bici y Barro (BIBA!)

Hoy domenica día de descanso voy a relatar la crónica de la odisea de ayer, el título de este post ya adelanta algo...
Bien resulta que nos habían invitado a la casa de un compi de trabajo de A. Al parecer era una especie de fiestecilla anglosajona del tipo "me-ayudas-con-el-trabajo-duro-en-mi-jardin-y-yo-a-cambio-te-doy-de-comer". Es algo común allá en tierras inglesas hacer eso para ahorrarte pelas en contratar mano de obra jejeje. La verdad que no es mala idea, si algún día tengo una casa tan grande como para requerir ayuda copiaré el invento inglés ;) Total nosotros ingenuos cual pitufos vemos el día despejado, soleado... y nos apetece usar las bicis. A. propone ir en coche una parte del trayecto y yo en plan valiente digo q no, que nos vamos tol camino en bici. Esta familia vive en Carona, muy cerca de donde estuvimos el lunes de senderismo. Los que habéis visto las fotos sabéis que hablamos de 700 y pico metros de altitud, así que nos enfrentábamos al reto de hacer poco más de 10 km en bici pero con un desnivel de cerca de 600m, de los que 2km eran en plano y el resto en subida. Lo hicimos pero yo tuve que parar varias veces porque las inclinaciones de algunas cuestas eran mortales y otras curvas cerradas como horquillas de pelo (y no exagero). Luego en casa de esta familia nos esperaba la estampa de un jardin lleno de barro o fango o como se llame la tierra todavía húmeda, que estaban removiendo con una excavadora y había tres tíos llevando carretillas de tierra para distribuirla. A. le tocó carretilla y a mi apartar piedras gordas, así estuvimos un par de horas o tres, no lo recuerdo, hasta q yo bajé por si la mujer del compi de A., Olga, necesitaba ayuda con la comida. Encontré una casa bastante grande pero caótica, teniendo dos niñas de menos de 10 años te lo puedes esperar pero aún así había muchas muchas cosas por cualquier sitio que miraras.
14:27h acabo de reiniciar el ordenador porque cuando el kaka-portatil entra en modo suspensión (mucho tiempo sin atenderlo) luego no hay coj... de volver a utilizarlo salvo presionando el botón de apagar y encender... sí, qué maravilla, y mi maravillosa mente que hoy no está muy fina se ha tirado escribiendo 40 min acabando esta crónica para nada, porque lo he perdido por no haberlo salvado aparte... en fin, toy cabreada conmigo misma y no me apetece seguir escribiendo... cuando se me pase os terminaré de contar la historia... dentro de un buen buen rato

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