miércoles, 29 de enero de 2014

Hoy necesito creer

Que a pesar de todo existe una naturaleza sabia que con el tiempo acaba poniendo cada cosa en su momento y en su lugar. Quiero confiar en este orden universal y no luchar más por mantenerme en un sitio al que ya no pertenezco, que cumplió su propósito y que debo dejar atrás.

Abrazo las nuevas oportunidades. Ahora sí. Estoy lista.

viernes, 17 de enero de 2014

¿Qué hago aquí?

Ésa es la pregunta que alguna que otra vez me ha pasado por la cabeza. Estoy aquí esforzándome por aprender un idioma, por entender las leyes y las costumbres, por adaptarme .... No puedes pedir ayuda porque aquí no tienes ni a la familia ni a los amigos para pedirles favores... en definitiva vivir aquí requiere un consumo de energía mucho mayor que si viviera en mi país de origen, donde todo sería más fácil.... entonces ¿por qué? ¿por qué he de seguir luchando? ¿No sería más cómodo intentar encontrar ese soñado equilibrio en otro lugar? Como me ha dicho una amiga, al emigrar, con el tiempo tiendes a quedarte con los recuerdos buenos del lugar de donde te fuiste. Piensas que allí te querían más o conseguías más. Haces un filtrado olvidando los malos tiempos pero te olvidas que allí también hubo tormentas y no siempre proclamaste ser féliz, de ahí que te fueras. Si volviera a mi país de origen, ¿podría ser féliz o las cosas ya no serían igual porque yo he cambiado y mi entorno allí también?
Son preguntas filosóficas que despiertan una crisis interna sin contestación a estas preguntas. "Sacar lo mejor de cada etapa" es el consejo que me ha dado esta otra amiga emigrante. "Vivir como si fuera el último año que vas a quedarte aquí". ¿Qué cosas echaría de menos de este país de acogida? Ahora mismo no estoy segura, pero mi apego a los lugares es más emocional que material. Y todavía no he desarrollado relaciones tan profundas que me hicieran dudar donde establecer mi residencia.

 (imagen extraída del libro de poesía "Volver a casa" de Magdalena Mohr)

Son muchos años los vividos en el país que me vió nacer. Aquí en cambio no llevo tantos, así que sería injusto comparar. Pero también es verdad que la facilidad para crear lazos afectivos no es la misma y no estoy segura de que por el mero hecho de vivir más años aquí, vaya a tener más relaciones afectivas lo suficientemente profundas como para que me creen apego. Conoces gente sí, pero muchos están perdidos como tú, van y vienen buscando experiencias antes de volver a su país, o simplemente buscando su verdadero "heimat" (palabra que no tiene traducción al español pero que sería cercano a hogar). Esta volatilidad a veces te impide profundizar más.
En fin no me enrollo más, sólo quería desahogarme un poco con estas inquietudes que a veces me atacan. Hace un par de días estaba más afectada, ...ahora se me está pasando un poco y empiezo a recuperar la ilusión por seguir haciendo cosas aquí. Dure lo que dure... :) 

sábado, 11 de enero de 2014

Let it go

Ayer estuvimos visitando un templo hindú por aquí y me gustó la experiencia. Estaba lleno de figuras y estatuas muy coloridas y adornadas, tanto de deidades masculinas como femeninas. Tuvimos la suerte de ir con una persona que nos estuvo un poco explicando las diferencias y el significado de cada cosa. Me llamó la atención ver cómo la serpiente, o cobra, (normalmente con varias cabezas) es considerada como un angel protector:

"nāgas are considered nature spirits and the protectors of springs, wells and rivers"
(origen de la foto)

Era común verla junto a las deidades sobre la cabeza.
Y aquí en occidente que siempre se las ha visto como algo negativo...

Me despido con la deidad Ratri, aquella que nos ayuda a dejar ir las cosas que ya no necesitamos en nuestras vidas. Me parece un buen consejo para comenzar el año...

Reestructurando relaciones

No sé si debería cerrar este blog puesto que es una etapa de nuestra vida que ya ha terminado y no sé si tiene sentido volver atrás. Pero......